En Australia – al igual que en muchos otros países – la educación parvularia es una de las profesiones peores pagadas. Por esta razón, un grupo de educadoras que trabajan en la ciudad de Canberra decidieron salir a protestar.
Estas educadoras creen que los bajos sueldos se debe en parte a que más del 90% de la fuerza laboral son mujeres. Muchas educadoras de esta ciudad viven con sus padres, ya que no les alcanza para independizarse. Argumentan que a pesar de tener estudios y calificaciones, éstas no se reflejan en los salarios.
Las diferencias en salario también son extensas si se compara con los y las profesionales que trabajan en el sistema escolar. Las educadoras de párvulos ganan un tercio menos que sus colegas en las escuelas, diferencia que se repite en muchos países, incluido Chile.